Día de la marmota

Otra vez aquí. Después de no sé cuántos años metida en este agujero durante más de 10 horas con estos niñatos asquerosos, me siento como si fuera el día de la marmota: atrapada en un mismo maldito día donde siempre me encuentro con la misma gente y siempre me pasan las mismas aburridas cosas.

Ayer, salí de la biblio con la cabeza como un bombo, pero es que fue llegar a casa y, relajarme? No, anoche recibíamos a nuestros invitados que venían a ver el partido a casa. Por qué no nos relajamos? Porque los invitados eran la familia, esa gran institución. Cuando se marcharon sentí que mi cabolo había crecido de tal manera que me había convertido en la perfecta cap-grossa que todas las fiestas populares ansían poseer. Sólo que en vez de sonrisa pintada lo que tenía era una mala leche considerable.

Luego se quejan de que nunca los invitamos, pero es que ahora seré muy consciente de no invitarlos nunca juas juas! Me sabe mal, porque las cosas que hacen y dicen las mamás lo hacen y lo dicen con la intención de ayudar y de facilitar las cosas, y la verdad es que sí que nos hacen la vida mucho más fácil: cuando vamos a comer a casa de ellos, cuando nos compran comidita y nos la llevamos a casa, cuando nos hacen fiambreras... pero es que yo pensaba que cuando estuviera en nuestra casa haríamos lo que NOSOTROS quisiéramos... pero no, estamos en nuestra casa, pero parece que las cosas no las sabemos hacer bien, y tiene que venir todo el mundo a decirnos cómo se tienen que hacer correctamente las tareas del hogar y ojo! incluso cómo decorar con más gusto la casa! Mi cuñao nos decía que la pecera la teníamos muy sosa, que teníamos que poner de fondo un papelito de esos que imitan el fondo marino (horterada de la vida!!); mi suegro que por qué tenemos el vídeo y la tele conectados, que es un derroche de energía y una tontería, que cuando encendemos la tele no tenemos porqué encender el vídeo; que teníamos que hacer un nudo o algo así a los cables; que teníamos que quitar un par de alcayatas del techo; mi mamá que tengo que limpiar las baldosas del baño; y mi suegra nos limpió el micro, el horno y no sé qué más (yo estaba en el curro cuando lo hizo y Pedro me lo comentó cuando la tropa ya se había ido).

El tema preferido de la familia cuando se reune cuál es? Cómo "los niños" se organizan la vida y las tareas del hogar: que si sois un desastre, que si hay veces que seguro que tenéis la nevera vacía, que el polvo tenéis que quitarlo cada día porque luego vienen vuestros amigos a casa y no pueden ver como la tele está cubierta de polvo (a ver, a nuestros amigos lo que verdaderamente les importa es que haya cerveza).
Ya sé que somos los pequeños de las familias, que somos muy payasos y que siempre estamos de cachondeo, pero no somos tontos! Y si nos da la gana tener la casa como la tenemos, pues nadie nos puede decir nada joder, digo yo que morirnos por alguna enfermedad provocada por la insalubridad de la casa, como que no...
Pero la gota que colmó el vaso fue: que no pudimos ver la tele por la cadena que queríamos... damos y caballeras, tuvimos que ver la tele por la sexta!! Decían que eran mayoría y que ellos decidían y no sé porqué fuimos tan tontos para ceder. Lo que tendríamos que haber hecho es poner la rac y ya está!! Pero no, cedimos y escuchamos como retransmitían "los pases magistrales de Guti" y otras chorradas por el estilo...

Y luego dicen que no les invitamos porque somos tacaños... mira, la próxima vez que quieran comer, los invitamos fuera de casa y listo, aunque nos dejemos un riñón!

Todavía recuerdo aquellas frases de "cuando estéis en vuestra casa, haréis lo que vosotros queráis..."