Ayer, durante 40 minutos no sabía si estaba escuchando la Cadena Ser o cualquiera de las emisoras que escuchaba mi padre hace unos años para agriar todavía más su humor (actualmente lo tiene prohibido por prescripción médica y por la de mi madre...).
O no sabía si esa gran política reformista (¿¿¿¿ahora a los involucionistas se les llama reformistas????), esa gran figura política, esa mujer taaaaaan inteligente (inteligente para joder a los más pobres) de la que hablaban era la Margaret Thatcher que benefició a unos pocos y jodió a la mayoría; la de la guerra de las Malvinas, la que destrozó la vida de millones de británicos con los brutales recortes en sanidad, con el cierre de minas, con el despido de obreros, privatización de lo público. De la amiga de Pinochet y Reagan y otros asesinos, y la que odiaba a todo aquel que olía a socialista y comunista. Esa gran incentivadora del CAPITALISMO SALVAJE que tan bien conocemos y que tan bien nos está sentando, ¿no?.
¿Se habrá encontrado en el infierno con su amigo Pinocho?
De todas maneras, qué decepción y qué indignación con la Cadena Ser, muy mal.
martes, 9 de abril de 2013
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