Las vidas de los emparejados son tan (aburridas) digo serenas, calmadas, tranquilas y beneficiosas para la salud...

Encuentro en el ascensor de dos compañeros de trabajo el día después de las vacaciones de navidules (por cierto, apenas se habían dirigido dos palabras en el tiempo que llevaban en la oficina):
-Què tal els reis? (típica pregunta para evitar el áspero trago de estar en el ascensor sin conversación...)
-Doncs mira, com que a casa som repúblicans, no fem reis sinó cagatió i m'han regalat bla bla bla...
-(...) Respuesta de la interlocutora olvidada, simplemente se le cayó la baba y todos sus esfuerzos radicaron en mantener la compostura.

También es cierto que si la interlocutora hubiera sido una acérrima juancarlista, la reacción hubiera sido bien distinta y quizá hubiera tenido que ocultar su indignación, digo yo.
Desde ese día la babeante se dio cuenta que, además de interesante, ese chavalín estaba bien güeno! yujuuuu!
Por cierto, esto no me ha pasado a mua. No, no, le pasó a... una amiga, sí eso, una amiga que prefiere ocultar su identidad.
A mí estas cosas no me pasan, pq yo estoy muy enamorada de mi chico, y lo quiero mucho y todo ese rollo y estas cosas no les pasan a las personas tan enamoradas como yo.